El mirador

 Con los rayos del sol apretando, imponiéndose al frío invernal, llegamos al mirador del salto del cabrero.

Un peñón rocoso fracturado por en dos, por una serie de fallas que lo cruzan. Impone. Miras hacia abajo mas de 80 metros nos separan del suelo.

Aquí el que mas y el que menos, sufrió algún golpe, esguince, o percance similar, sin mayores consecuencias que un hematoma y poco mas.

Un alto en el camino para reponer energías y para contemplar lo espectacular del paisaje, y a los primeros buitres ( de dos alas) de la nutrida colonia.

Algunos buitres vuelan más bajo



El lugar se merecía un par de horas, sólo para contemplar el mirador y sus alrededores , pero el tiempo es el que nos marca la ruta y había que partir, porque todavía nos quedaba visitar las caleras, de camino a Benaocaz y el camino de regreso. Y Nazarín se impacienta cuando se aproxima la hora...

PD: seguimos pendientes de la fecha de la próxima salida 13 ó 14 de Marzo. Hay que decidirse pronto.

Son surcos del azar los caminos