El 1 de Octubre , otra vez en la ruta. Esta vez una ruta fácil y que se puede prolongar a medida del usuario. Nos vamos hasta el Ronquillo, y después de la reglamentaria tostada en el Restaurante el Desembarco, nos dirigimos por una carretera secundaria (o terciaria), la C-421 hasta la Vía Verde del Ronquillo, que discurre por el trazado del antiguo ferrocarril minero de las minas del Cala.
Esta ruta, de la Vía Verde del Ronquillo, es una ruta apta para todos los públicos. No hace falta una gran preparación física también apta para hacerla en bicicleta.
Varios cortijos con cerdos , a la vera del camino
Los restos de una de las muchas"estaciones" y edificios de servicio al tren minero
Aquí la ruta sufre un desvío del trazado original, pues este puente, sólo se conservan los pilares, la parte de hierro desapareció
El primer túnel que nos encontramos, está transitable. El siguiente que nos encontraremos está cerrado, lleno de agua y en muy malas condiciones, y en vez de seguir un carril, a la izquierda, optamos por salvar el túnel campo a través
Y aquí nos encontramos el inconveniente gordo de la ruta. El puente, la parte de hierro está deteriorada.
Es un puente no apto para los que sufren vértigo.
Por cierto, no sé si este carril es competencia de la Confederación hidrográfica del Guadalquivir, del Ayuntamiento del Ronquillo, de la Diputación o de quien sea, pero con muy poco dinero se podía subsanar.
Así que optamos por bajar hasta el río, por el monte para poder salvar esta contingencia
A pesar de que estamos a 1 de Octubre y la temperatura ronda los 38º, el río lleva muy poca agua
Volvemos a la ruta
Otra antigua estación o edificio de servicios
Estamos en época de berrea y no podían faltar los ciervos. Unos pocos vimos a lo largo del camino
Y llegamos a la presa del pantano de Zufre. A partir de aquí está vallado y no se puede seguir, asi que damos la vuelta
Y volvemos a bajar al rio buscando una sombra para comer los bocatas y refrescarnos un poco
A partir de aquí, la vuelta se hizo muy dura, porque eran las 4 de la tarde, la temperatura rondaba los 38º ( o eso marcaba el termómetro/brújula) y no había ni una sombra
Terminamos la ruta en el mismo punto de partida y nos rápidos al pueblo a beber, que a todo esto nos habíamos quedado sin agua
Son surcos del azar los caminos
