miércoles, 1 de febrero de 2012

Fuenteheridos 2


... poco a poco vamos liberando la ruta elegida. El paisaje cambia, de repente encinas, dan paso a castaños (cañotas) fantasmagóricas, bosque de matorral, pinares,...


... que no, que no, que este pino no lo plantó Nazarín, que ya estaba allí. Él sólo se está atando las botas. Claro al ver su cara de felicidad, cualquier mal pensado, pensaría...


Una zona de cañotas, grandes troncos de castaño, con su fantasmagórico aspecto nos saluda a nuestro paso.



Una casa rural, en medio del bosque. Ahora mismo no hay nadie, pero que buen lugar para pasar un fin de semana de relax.


Varios riachuelos tuvimos que vadear. Incluso el equipo de ingenieros tuvo que construir una pasarela para poder salvar este pequeño escollo en forma de riachuelo.



Son surcos del azar los caminos

No hay comentarios:

Publicar un comentario