Después de tres horas de dura marcha liberadora, llegamos a la presa de Castilblanco de los Arroyos.
Todo discurría con normalidad, observábamos la caída del agua desde lo alto de la presa...
Cuando de repente, a nuestra espalda, allí estaba, la malvada víbora, intentando cobrarse una presa de gran calado, y todo apuntaba a que uno de nosotros, acabaría siendo pasto de su mortal veneno...
... intentábamos la huida...
... pero con un giro inesperado volvió a encarar al grupo, amenazando nuestra integridad, y por un momento, a mas de uno se nos heló la sangre, pero, contra todo pronóstico, inesperadamente, surgió ella, ...
... con su vara, dispuesta a domar a la bestia. Era Marga de la Jungla,
sin mediar palabra, con la total naturalidad del que está acostumbrado a tratar con semejantes alimañas, crótalos y demás víperas, ...
... ella ante nuestros ojos asombrados, puso al animal en el lugar de la naturaleza que le corresponde, y emprendió la huida.
Una vez mas, la buena preparación de nuestros miembr@s, solventó una situación tensa y que pudo acabar en tragedia.
Hay varias fotos, mas comprometidas, mas trágicas, con el crótalo escupiendo su mortal veneno y varios, lances en los que a punto está de dar un mordisco mortal a Marga, pero esas fotos están a buen recaudo y van a participar en un concurso fotográfico anual de National Geographic, y como las fotos participantes tienen que ser inéditas y no publicadas en ningún medio, comprenderéis que deban estar a buen recaudo.
Son surcos del azar los caminos
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